domingo, 22 de abril de 2012

“..pelagianismo y semipelagianismo”



Pelagianismo se define como la antigua herejía que afirma que toda persona tiene la habilidad innata para evitar caer en pecado y no es totalmente dependiente de la gracia para cualquier cosa buena. (Pablo mismo pregunta a los creyentes ¿que tienen que no hayan recibido? 1 Corintios 4:7 ) Muchas veces los calvinistas (y también los luteranos) acusan al  arminiano de caer en esta herejía. De negar la gracia favoreciendo una salvación por méritos (ganar la salvación mediante la buena obra de independientemente decidir confiar y obedecer a Dios) Pelagio y el pelagianismo fueron condenados como herejia en el tercer y cuarto concilio ecuménico en los años 431 y 451 DC.

Semi-pelagianismo es el nombre dado a la enseñanza propuesta por algunos de los criticos de Agustin de Hipona. Juan Casiano fue un monje notable que vivió a inicios del quinto siglo. Se opuso a la enseñanza de Agustin respecto a la predestinacion y afirmó a cambio que el pecador, aunque caído, puede iniciar su salvación “ejerciendo una buena voluntad” hacia Dios. Dios espera ver esta iniciativa y solo en ese caso responde con gracia salvífica. Esto fue condenado como una herejia en el año 529 DC y los arminianos siempre han rechazado dicha enseñanza.

Desafortunadamente, en el día de hoy, demasiados cristianos protestantes caen dentro de la categoría de pelagianos o semipelagianos y los criticos calvinistas tiendan a apuntarlos con el dedo señalando que su error es resultado de la influencia arminiana. El verdadero arminianismo, sin embargo, no cae en ninguno de estos dos errores.



Extraído: An Arminian Account of Free Will
Roger E. Olson