domingo, 24 de junio de 2012

"..elección congruente"



Romanos 8:29-30 declara que Dios "conoció" seres humanos individuales, y a estos mismos individuos predestinó, llamó, justificó y glorificó, hablando de los resultados finales ( lejos en el futuro al menos para los recipientes involucrados ) como un evento pasado y ya resuelto , algo que siempre ha sido así para Dios. 


Conocimiento ( proginosko como verbo ) en su uso neotestamentario en relación con Dios ha adquirido un contenido y significado adicional. Respecto a su uso en Romanos 8:29, Wuest en su "Word Studies" concluye que: "el termino significa algo más que simple conocimiento previo, aunque este conocimiento es parte de la omnisciencia de Dios". Si este significado adicional neotestamentario es percibido como una "pre-experiencia con algo" buscando dar a entender que no hay momento en la eternidad donde el resumen total de la experiencia de Dios con cada persona no sea parte del presente de Dios, entonces las piezas de la elección y los pasajes de las escrituras donde este concepto esta fundado concuerdan de una manera más convincente y congruente.


Gigantes de la fe han batallado con el hecho de como una elección incondicional puede ser congruente con la libre voluntad del hombre. El gran predicador bautista del siglo IXX Charles Spurgeon, cuestionó si la enseñanza de la Biblia en estos temas podría alguna vez ser reconciliada: "no estoy seguro si en el cielo seremos capaces de conocer donde la libre voluntad del hombre y la soberanía de Dios se cruzan, pero ambas son grandes verdades". Sin embargo, si uno afirma que "conocimiento previo" implica una "experiencia presente con lo eterno - desde antes en la eternidad pasada y hacia la eternidad presente y futura" emerge congruencia en los pasajes bíblicos. 


Si Dios vive en un eterno presente, entonces Él siempre ha tenido no solo un conocimiento sino una experiencia con cada individuo. Por lo tanto nunca ha existido un momento en la eternidad donde Dios no haya experimentado una relación con cada persona elegida siendo convicta, aceptando el don divino de la fe, conversión, santificación, glorificación y su eterna adoración y alabanza en los cielos nuevos y tierra nueva. Por otra parte, Dios siempre ha experimentado de los no-elegidos su rechazo a la convicción del espíritu, su rechazo a su propia persona, su corazón progresivamente endurecido,  y su condenación y juicio eterno. 




Adaptado: Congruent Election, Understanding Salvation from an "Eternal Now"
Richard Land

No hay comentarios:

Publicar un comentario